jueves, 11 de agosto de 2022

LILIANA





Tuve la dicha de que mis ojos te vieran por primera vez, tuve el honor de ser llamada tu hija y ser tu primogenita, tuve el honor de acompañarte casi veintinueve años en tu vida y asi pude ver como una mujer era el pilar fundamental de la casa, pude ver como cada dia te ingeniabas por un menu nuevo, mis ojos siempre miraron una casa aseada, pude entender la educacion que querias para nuestras vidas y hoy puedo decirte que esta llena de valores y humildad y por sobre todo tuve el placer de acompañarte a casa de Dios como cada domingo para entregar lo mejor de nuestras vidas y asi mi mente  cuando era una niña sin entender muchas veces porque ibamos a ese lugar tan aburrido donde no me dejaban correr y muchas veces me hacias guardar silencio, porque la presencia de Dios estaba llenando cada corazon, en ese momento no entendia porque levantabas tus manos y muchas veces llorabas, algunas veces pensaba que sentias pena o que tal vez me portaba tan mal que llorabas por eso. Hoy yo siento un amor que sobrepasa mi entendimiento y cada palabra se cumple cuando el tomaba mi mano diciendome que mi generacion seria bendita, los hijos de mis hijos verian su mano obrar asi como hoy yo lo veo en mi vida.

Tuve la dicha de que me hayas regalado dos hermanas maravillosas y pude ayudarte en su crecimiento, en sus duchas por las tardes, pude darles comida y ayudarte en tus quehaceres, me enseñaste que el respeto es la base para formar cualquier hogar solido y por sobre todo el amor nunca puede faltar, puedo recordar cada lección aprendida, cada regalo y toda esa preocupacion por mi, puedo recordarte sonriendo con mis logros, puedo recordarte dandome ese abrazo caliente cuando sentia que el mundo se venia abajo, siempre estabas para decirme que "no puedo bajar los brazos" no puedo rendirme, no puedo dejar pasar mis sueños, vi tus ojos rebosar en llanto y alegria cuando pude cumplir cada una de mis metas personales, tuve el placer de conocer una gran mujer, una gran mamá, una gran esposa, una gran hija y una gran hija de Dios. 

Cuando pienso en ti, pienso en nuestras largas conversaciones sobre la vida, sobre el amor y el perdon, hoy te encuentras durmiendo en los brazos de Dios esperando que llegue el dia en donde todos podamos encontrarnos y abrazarnos sin dolor, sin pena, ni enfermedades, para comenzar este escrito quise comenzar recordandote, quise recordar tu voz, quise recordar tu perfume, quise recordar cuanto te honre en vida, cuanto te ame sin limites, cuantas sonrisas pude entregarte y hoy es parte de mi consuelo el poder recordar que mi corazon siempre estuvo dispuesto para hacerte una mujer feliz, pude decirte cada vez que eres una gran mujer, que no haz hecho las cosas mal, tuve el placer de verte en la iglesia nuevamente levantando tus manos al cielo, pude ver la presencia de Dios en tus ojos, pude ver esa llama nuevamente arder, pude ver a Dios a traves de ti, pude verlo en tu llanto, pude verlo en tu desesperacion, pude verlo tomando tu mano en cada instante, para mi no existe mayor delicia que recordar tu espiritu siendo transformado, hoy puedo mirar hacia atras y me siento a dar gracias por haber tenido ese placer, por verte triunfar y lograr tus metas personales, le doy gracias incansables a Dios por darme la dicha de ser llamada tu hija y por sobre todo por haberme mostrado el camino de vuelta a casa. 

La vida es un episodio tan corto y sublime, que hoy puedo decir que cada dia me rindo delante de su presencia, para mi cada cosa que Dios ha hecho en mi vida y en mi familia ha sido maravillosa, cada dia le agradezco que aun piense en mi, le agradezco por cada momento vivido a tu lado, le agradezco por no soltar mi mano en aquel momento que decidio tomar tu vida, porque ese momento tan intimo yo le dije "Dios mio porque me has abandonado" y en todo momento me decias "nunca te he abandonado" por cada situacion yo te doy gracias, por cada lagrima yo te doy gracias, por sanar mis heridas y por dejar que me esconda debajo de tus alas cada vez que mi corazon tiene tristeza, por colocar balsamo de paz en el corazon de mi familia, aun cada dia te pido que sigas examinando mi corazon para algun dia alcanzar un poco mas de gracia, para alcanzar un poco de ese
gran amor que veia en mamá, para mostrar tu gran amor.