El viento comienza a pasar por su cuello esa especie de nudo tomando su saliva mientras intenta pasar desde la tráquea hasta el infinito, el estomago es una cantimplora que guarda una mezcla de tragos amargos, ese liquido que recorre todo tu cuerpo como una especie de veneno y no puedes hacer nada para detener tan grande dolor, el hígado comienza a dejar de funcionar y pareciera que todo un lado de tu cuerpo esta muriendo cada parte que compone tu piel comienza a tomar ese color tan hermoso que abrigaba cada día.
Sigues caminando pero ese viento que pasa por tu cara como silbido comienza a avisarte que tu final esta muy cerca, estas muriendo por dentro y nadie nunca podrá detener aquel susurro, la vida a veces se convierte en una batalla en donde solo quieres encontrar un lugar seguro para permanecer hasta el termino, esta vez siento mi saliva en mi boca no puedo dejar de pensar en como todas mis decisiones fueron erradas y anhelo retroceder el tiempo, este día anhelo cambiar tantas cosas de su lugar y me sigue matando saber que mi muerte se esta acercando y nunca podre decir que lo lamento.
Lamento ser esa clase de persona que la señalan, lamento haber tomado malas decisiones, lamento no ser esa chispa en la oscuridad, lamento no poder ser alguien para tomar la mano y mirar las estrellas, estoy muriendo y ese silbido me hace querer decir todo lo que siento y es que vi pasar mi vida entre malas decisiones y errores que me pesaran toda la vida pero ¿Cómo puedo solucionarlo?¿Quien puede salvarme este día? todo el mundo habla de ti como si pudiesen ver lo que hay aquí adentro, como si hubiesen estado en tus peores batallas y ahora que no tengo salida, recuerdo todas las veces que doble mi rodilla a llorar, recuerdo pedirle tantas veces a Dios que saque esto que me esta hundiendo y cuando ves esa luz al final del camino, ese pequeño destello que fue hecho para ser abrumado con miles de errores y luchas que no sabes como lidiar.
Nadie, nadie merece ser señalado, los procesos que vivimos son parte de esa etapa que odiamos, son parte de un peldaño mas para llegar a ese inmenso cielo azul, son miles de formas para decirte "No lo vuelvas a hacer" son decisiones que Dios no puede detener, te hacen llegar a ese abismo lleno de soledad, te hacen desear borrar todo ese expediente, te hacen querer volver al día uno, siendo que nunca puedes regresar a aquel día.
La asfixia se tomo de mi cuello, se subió a mi espalda y cuando pude abrir mis ojos yo ya estaba tumbada en el suelo, pero ¿A quien le importa? tengo la mitad de mi cuerpo muerto, tengo un estomago lleno de veneno, tengo un corazón fuerte que a la primera asfixia se aferra a mi cabeza que no deja de pensar en los errores, que no deja de pensar que necesita un refugio, que necesita un poco de contención, que tal vez en este momento solo tomen mi mano y me digan que todo va a estar bien, aunque nada lo este.
La asfixia me silba y esta vez ya no puedo ver aquel horizonte que era esperanzador cuando miraba esa silueta aparecer en mis mejores sueños, esta es mi recompensa, esto es parte de toda esa mierda que fui, es saber que estoy asfixiándome en todos mis sueños, errores, mentiras, desilusiones, malas decisiones, gritos, llanto, mierda, golpes, libros, escritos, vida, familia, trabajo, amigos, responsabilidades, momentos, situaciones y todo lo que hoy me llevo ser parte de esa asfixia.