Lectores.

Buenas noches lectores con insomnio, buenas noches enamorados con el corazón destruido, una vez mas me encuentro frente a la pantalla de un computador para confesar lo que nunca seré capaz de enfrentar en la realidad, no espero que después de esto pueda sentirme un poco mejor, ni tampoco espero volver a comenzar, ni mucho menos que mis mañanas sean mas soleadas, estoy convencida que nunca regresaras, hoy comencé a recordar tu mirada y todas las veces que nos sentamos a reír, hoy recordé una de tantas cosas por las cuales me enamorabas, me traslade a nuestro día uno, viaje por todo un año recordando tantas fotografías, tanta pasión y entrega, tantos sueños que han quedado guardados en una pieza de color naranja y blanco, no es fácil volver a verte, mi postura es horrible, mis palabras son peores, aun no se como debería comportarme y lo único que dejo salir es mi rencor, solo quiero confesar una cosa y que nunca te lo diré, aun te amo y se que te amare por siempre, aun sabiendo que mi amor sobrepasa todo lo que mi razón no me deja.

Estoy completamente atada a un orgullo que me hace encontrar miles de razones para no llamarte, puedo confesarte en este momento que  anoche soñé contigo, no deseo que mueras en mis sueños, no deseo volver a despertar con lagrimas en los ojos, solamente deseo ser feliz,  si tan solo pudieras entender que no necesito mas melancolía ni drama,no necesito un juicio por todos nuestros errores, jamas costara volver a sacar una sonrisa de mi rostro, tener un motivo para viajar para volver a salir como dos personas desconocidas que desean construir un mundo nuevo, para volver a reír juntos, pero el drama fue el actor principal de todo este mundo al que tu llamabas nuevo, solo quiero que entiendas que te amare por siempre, solo quiero que sepas que esta noche deje un poco de lado mi orgullo, y esa luz que aun brilla me hizo alejar lo que parecía ser una promesa, el hombre ideal, aun así fue inevitable confesar que tu regreso solo hizo que mi corazón volviera a latir, fue inevitable ese silencio en aquel auto, fue inevitable volver a cerrar los ojos y pensar que tal vez nunca podre explicarte tantas cosas llamadas amor.